En Allegra adquirmos el compromiso de que los nuestros residentes se sientan como en casa.
¿Cómo lo hacemos desde el punto de vista social?
• Procurando que vivan en un entorno agradable.
• Alentado a nuestros residentes para que adquieran un compromiso con este entorno.
• Desarrollando proyectos en común, es decir, reunirnos para decidir qué y cómo quieren que sea su casa.
Hace dos años decidimos iniciar en Allegra un nuevo proyecto: la construcción de un huerto urbano.
El huerto urbano es un sistema de cultivo que permite obtener gran variedad de hortalizas: tomates, pimientos, berenjenas, etcétera. Sus características son ideales para ubicarlo en cualquier espacio de nuestras instalaciones.
Muchos de los residentes habían tenido huerto en su casa antes y compartiendo experiencias con ellos nos dimos cuenta de su motivación y de los amplios conocimientos que tenían sobre el cultivo de la tierra.
¿Cuáles son los objetivos que nos permite esta herramienta de trabajo?
Potenciar el contacto con la naturaleza de nuestros residentes, dado que posibilita realizar la actividad en un espacio abierto como es el jardín.
Ser una herramienta ocupacional ayuda a destinar el tiempo de los residentes a una tarea muy gratificante para ellos.
Facilitar la adquisición de comportamientos responsables ja que si no atienden el huerto las hortalizas se echaran a perder.
Mantener la motivación de seguir aprendiendo, ya sea a través de la recuperación o recuerdo de conocimientos del mundo rural o transmitiendo conocimientos a otras generaciones o al mismo personal del centro.
Aumentar la autoestima, basada en el hecho de sentirse útiles.
Promover el trabajo en equipo y las relaciones sociales.
Como en la mayoría de actividades o proyectos siempre nos encontramos con personas a quienes les gusta esta actividad mucho más que las demás. Por esta razón, cuidan y miman las plantas diariamente, este el caso del siempre recordado Sr. Francesc Sánchez.. La realidad es que entre todos hacemos una gran tarea para cuidar y regar a diario los tomates, la berenjenas, lechugas y pimientos que pueblan nuestro huerto en la actualidad.
El pasado mes de junio, conjuntamente con la terapeuta ocupacional, nos reunimos con un grupo de residentes para decidir qué sembrar y el mejor método para hacerlo.
- Un par de meses después y gracias a la colaboración delos residentes y personal del centro ya tenemos un huerto así de bonito.
- Después de estos dos años, cuál es nuestra valoración?
- Muchos residentes y familiares cuando salen al jardín suelen hacer un paseo hacía el huerto, observando así el avance y el crecimiento de las verduras e ilusionándose cuando empiezan a brotar las primeras flores que finalmente se convertirán en hortalizas. Esta actividad también ha permitido crear temas de conversación entre los residentes y/o familiares de tal modo que cada uno aporta su propia experiencia y opinión, al mismo tiempo que intercambian recetas de cocina o valorando el mejor momento para sembrar productos que habían sembrado en otras etapas de su vida…
- Además también hemos valorado el hecho de cuando mejor se trabaja el proyecto del huerto es entre los meses de mayo y octubre, puesto que la condiciones climatológicas son más favorables. En invierno da más pereza salir al jardín para cuidar el huerto o simplemente para hacerle una visita. Por lo tanto, es ahora, en verano, cuando más podemos aprovechar para dar vida al huerto y trabajar en est proyecto que tantas alegrías nos da.
Lena Ambrós
Educadora Social de ALLEGRA (Sabadell)