La discriminación y la violencia de género afecta a mujeres de todas las edades, de todos los estratos sociales, en todas partes del mundo. Sin embargo, los efectos que la violencia pueda tener no son iguales para todas las mujeres, varían dependiendo de la franja de edad de la que hablemos.
Durante este año 2022 han muerto 34 mujeres víctimas de violencia de género, 3 tenían más de 60 años, y podemos contar 5 más si tenemos en cuenta la franja desde los 51 años. Eso supone un 23% del total.
Con estos últimos datos podríamos pensar que a más edad, menor riesgo de padecer violencia de género, pero esta afirmación está muy lejos de la realidad. La invisibilidad que padecen las mujeres mayores es doble: la discriminación que sufren por el hecho de ser mujeres y la que sufren por su edad, y que tienen las siguientes características:
- Larga duración de la violencia: “Con la cuchara que escoges, tienes que comer”.
- Utilizar la edad como herramienta para hacer daño: “Vieja y mentirosa te van a decir”.
- Las relaciones con la pareja se iniciaron cuando aún no existía conciencia de género: “Llevas aguantando toda la vida y con tu edad te quieres hacer la moderna”.
- La violencia está normalizada en su día a día: “Quien bien te quiere te hará llorar”.
La del 25 de Noviembre forma parte de las ocho campañas que en 2022 CONFEMAC ha puesto a disposición de Ayuntamientos, Entidades y Centros de todo el territorio nacional bajo el lema común “Personas mayores, con los MISMOS derechos”.
PROPUESTAS
En este contexto, desde CONFEMAC reivindicamos un eje específico que trate la violencia de género en mujeres mayores porque sus realidades propias siguen estando invisibilizadas. Y para ello hacemos algunas propuestas como:
- Promover la investigación de la violencia de género en mujeres mayores. Conocer cuál es la realidad específica de las mujeres mayores víctimas de violencia de género
- Impartir formación donde el género y edad sean dos variables unidas, porque tal y como se viene desarrollando hasta la fecha, y por la experiencia de nuestra entidad, podemos afirmar que las mujeres mayores no se sienten representadas como un grupo de especial vulnerabilidad ante estas realidades.
- Difundir campañas de sensibilización y prevención de la violencia de género en mujeres mayores, que visibilicen la realidad de este colectivo y con las que se puedan sentir identificadas.
- Impulsar la participación social de mujeres mayores ofreciendo espacios donde puedan expresar sus vivencias, preocupaciones y emociones.
- Tener en cuenta que muchas mujeres víctimas de violencia de género no cuentan con recursos económicos suficientes que cubran sus necesidades (que pueden verse incrementadas por la edad) y eso hace que los miedos por cómo, dónde y de qué van a vivir las asolen y las condenen a vivir el resto de sus días en una situación de violencia.
Bajo el lema: “No somos invisibles: edadismo y machismo”, queremos exaltar los derechos de las mujeres mayores, que son los mismos que las mujeres de cualquier otra edad, porque tengas la edad que tengas, tienes derecho a ser respetada, a ser libre, a vivir tu vida y tomar tus decisiones y, sobre todo, tienes derecho a vivir el amor sin que te hagan daño.
Que la frase “eso ha sido así de toda la vida” no sea una excusa para no cambiar.
