actividades creativas terapéuticas

Actividades creativas terapéuticas para personas mayores con deterioro cognitivo

 

El deterioro cognitivo es un proceso natural del envejecimiento, pero puede ser acelerado o agravado por diversas enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson. Estas patologías pueden afectar a la memoria, el lenguaje, la orientación espacial y temporal, y otras funciones cognitivas, lo que puede provocar alteraciones emocionales y de comportamiento en las personas mayores.

Sin embargo, existen diversas actividades creativas terapéuticas que pueden mejorar la calidad de vida y el bienestar de estas personas, al estimular su capacidad cognitiva, emocional y social.

Una de las actividades más recomendadas es la arteterapia, que consiste en el uso de técnicas artísticas para expresar y procesar emociones, pensamientos y vivencias. Según un estudio realizado por la Universidad de Navarra, la arteterapia mejora el estado de ánimo, la autoestima y la comunicación en personas mayores con demencia.

Además, puede estimular la memoria, la atención y la coordinación visomotora, lo que puede retrasar el deterioro cognitivo y mejorar la calidad de vida. Algunas técnicas de arteterapia que se pueden utilizar son la pintura, el dibujo, la escultura, la cerámica y la fotografía. Estas actividades no requieren de habilidades artísticas previas, sino que se trata de explorar y experimentar con los materiales y las formas, en un ambiente relajado y seguro.

Otra actividad que puede ser beneficiosa es la musicoterapia, que utiliza la música y el sonido como medio para estimular la cognición, la memoria, la comunicación y la emoción. Según un estudio publicado en la revista Dementia, la musicoterapia puede mejorar la memoria episódica y la calidad de vida en personas mayores con demencia. Además, puede reducir la agitación, la depresión y la ansiedad, y aumentar la interacción social y el bienestar emocional. Las actividades de musicoterapia pueden incluir escuchar música, cantar, tocar instrumentos, improvisar y componer, adaptadas a las capacidades y preferencias de cada persona.

Por último, se ha demostrado que las actividades cognitivas y sociales, como los juegos de mesa, la lectura, la conversación y las manualidades, pueden mejorar el rendimiento cognitivo y la funcionalidad en personas mayores con demencia.

Según un estudio publicado en la revista BMC Geriatrics, los juegos de mesa y la lectura pueden estimular la memoria, la atención y la fluidez verbal en personas mayores con deterioro cognitivo leve. Además, estas actividades pueden fomentar la socialización, la creatividad y la autonomía, y reducir la sensación de aislamiento y la dependencia.

En conclusión, las actividades creativas terapéuticas pueden ser una herramienta eficaz para mejorar la calidad de vida y el bienestar emocional de las personas mayores con deterioro cognitivo. La arteterapia, la musicoterapia y las actividades cognitivas y sociales pueden estimular la cognición, la emoción y la socialización, y reducir los síntomas de depresión, ansiedad y agitación.

Además, estas actividades pueden adaptarse a las capacidades y preferencias de cada persona, y ser una fuente de placer y de expresión personal.