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La importancia del zinc para el sistema inmune en el envejecimiento

A medida que envejecemos, nuestro sistema inmunológico a veces puede debilitarse. Ese es un problema especialmente durante la actual pandemia de coronavirus, que ha demostrado ser más grave para las personas mayores. Ha llevado a que más personas se concentren en los cambios que pueden hacer para desarrollar sistemas inmunológicos más fuertes.

El zinc juega un papel central en este esfuerzo. Desde la década de 1960, los investigadores médicos han realizado estudios que demuestran que el zinc es esencial para el funcionamiento adecuado del sistema inmunitario. Pero millones no obtienen suficiente zinc en su dieta, con un estimado de 17% de la población mundial en riesgo de ingesta inadecuada de zinc.

Uno de los movimientos más inteligentes que podemos hacer a medida que envejecemos es asegurarnos de que nuestra dieta sea rica en alimentos que contengan zinc y otros nutrientes y fitoquímicos que promuevan un sistema inmunológico saludable. El zinc se puede encontrar en una variedad de alimentos, incluidos los champiñones , algunos tipos de sopa y el pasto de trigo. Además, muchas verduras y frutas tienen efectos estimulantes del sistema inmunológico y también pueden conducir a puntajes más altos en las pruebas cognitivas.

La deficiencia de zinc conduce a problemas de salud en todo el mundo

El zinc es un oligoelemento que los científicos ahora saben que es esencial para la vida debido a su «papel fundamental en la expresión génica, el desarrollo celular y la replicación», según la Organización Mundial de la Salud . La deficiencia severa de zinc conduce a condiciones que incluyen deterioro de la función inmunológica, trastornos de la piel, disfunción cognitiva y anorexia.

Si bien la deficiencia severa de zinc se considera rara, la OMS informa que la «deficiencia de zinc de leve a moderada» prevalece en todo el mundo. Los científicos continúan investigando el vínculo entre el zinc y el sistema inmunológico. Pero no hay duda de que existe.

Por ejemplo, un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition informó que cuando se les administró un suplemento de zinc, los residentes de una residencia de ancianos aumentaron sus niveles séricos de zinc y células T, ambos clave para un sistema inmunológico saludable. Los que recibieron un placebo no vieron ninguna mejora en esos números.

Mientras los investigadores continúan investigando cómo funciona el zinc con el sistema inmunológico, ya se sabe que la presencia de zinc es esencial para la síntesis de ADN y la proliferación celular. Por lo tanto, los científicos creen que las células de alta proliferación, como las células inmunitarias, dependen de un suministro adecuado de zinc.

Cómo mejorar su consumo de zinc

Si no prestamos atención a la ingesta de zinc a medida que envejecemos, nuestra inmunidad puede comenzar a disminuir, generalmente entre los 60 y los 65 años. Puede aumentar su ingesta de zinc cambiando su dieta. Aun así, muchas personas también pueden necesitar tomar un suplemento.

Los alimentos ricos en zinc incluyen mariscos, legumbres, semillas de sésamo, anacardos y otros frutos secos, queso, huevos, cereales integrales y chocolate negro. Además, algunas verduras incluyen cantidades saludables de zinc. Además de los champiñones, las verduras ricas en zinc incluyen los guisantes, las espinacas, las habas, los espárragos, las hojas de remolacha, el brócoli, el maíz dulce y la okra.

Al igual que con todas las opciones de dieta, debe sopesar los beneficios para la salud frente a los posibles resultados negativos. Por ejemplo, la carne roja tiene un alto contenido de zinc, pero demasiada carne roja se asocia con problemas cardiovasculares. El mejor paso es consultar con su médico acerca de sus niveles de zinc y obtener orientación sobre la mejor manera de mantener esos niveles altos a medida que envejece, ayudando a mantener fuerte su sistema inmunológico.