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Exoesqueletos para mantener la salud de las personas mayores

 

La frase exoesqueleto humano suena como sacada de una película de ciencia ficción, pero como tantas otras cosas en el mundo moderno que alguna vez parecieron una fantasía, los exoesqueletos son una realidad que está remodelando la experiencia de vida de las personas mayores tal como la conocemos.

Las noticias recientes han descrito el uso de exoesqueletos en Japón para ayudar a los adultos mayores a permanecer productivos en la fuerza laboral por más tiempo y mantenerse físicamente activos hasta bien entrada la vejez. La población de Japón está algo sesgada hacia los adultos mayores, ya que el país tiene la mayor proporción de ciudadanos mayores de 65 años de cualquier nación. Esta situación hace que las personas mayores no puedan recibir atención y necesiten máquinas que intervengan y los ayuden a realizar las actividades de la vida diaria. Las empresas de todo Japón han comenzado a competir para crear el mejor traje, adoptando una serie de enfoques diferentes. Uno es un traje tipo mochila que se carga apretando una bomba manual que llena los músculos del traje que funcionan con aire a presión. Le permite al usuario levantar hasta 55 libras y está disponible a un costo de aproximadamente $1,300.

Otros exoesqueletos están siendo fabricados por nombres conocidos de otras industrias como Panasonic y Toyota. Otros trajes están dirigidos a detectar los problemas que más afectan a las personas mayores, como las caídas.

Según un informe del American Journal of Public Health , casi un tercio de los adultos mayores de 65 años reportan dificultades para caminar solo tres cuadras. Este hecho se ha convertido en la motivación para la investigación sobre el desarrollo de un exoesqueleto liviano que algunos denominan «ropa motorizada». La Agencia de Proyectos de Investigación del Área de Defensa (DARPA) ha financiado la investigación en asociación con la empresa sin fines de lucro SRI International, las mismas personas que nos dieron Siri.

¿Cómo funcionan los exoesqueletos?

El ejemplo de la ropa motorizada se ha convertido en un producto propio llamado Superflex, definido como una tecnología muscular elástica. Originalmente diseñado para ayudar a los soldados a llevar su equipo y experimentar niveles más bajos de fatiga, Superflex se asemeja a un traje de neopreno que sostiene una computadora a bordo para garantizar que el traje funcione en colaboración con sus músculos reales.

Un proyecto de Harvard se centra en construir un exoesqueleto capaz de ayudar a los pacientes con accidentes cerebrovasculares a recuperar su fuerza y ​​fluidez de movimiento. El traje ya ha entrado en ensayos clínicos.

Otras versiones de la robótica liviana se enfocan en condiciones o movimientos específicos, ya sea ayudar a un parapléjico a patear una pelota de fútbol o caminar a pacientes con parálisis cerebral. Los dispositivos a menudo se cosen directamente en la ropa del usuario y ayudan a estimular los movimientos correctos.

En el caso de Active Pelvis Orthosis (APO), la tecnología consiste en una abrazadera para la cintura y motores conectados a las caderas que mueven eslabones livianos que se conectan a las abrazaderas para los muslos. Usando un algoritmo desarrollado para monitorear los movimientos naturales de las piernas de la persona, el sistema puede detectar cambios en la forma de andar de la persona que indican que está comenzando a ocurrir una caída. Luego, los motores crean fuerza para ayudar a las piernas a evitar la caída.

Muchos dispositivos todavía están en desarrollo, mientras que otros están tan lejos como para buscar la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos. A medida que este campo de investigación comienza a florecer y arrojar resultados reales, espere escuchar más sobre el potencial de los exoesqueletos para ayudar a las personas mayores a mantenerse activas por más tiempo.