Fundación GeroActivismo vejez chile

La lucha por la vejez de la Fundación GeroActivismo en Chile

El estallido social en Chile activó la respuesta de diversas organizaciones y profesionales para  responder ante la contingencia. Es así como la Fundación GeroActivismo realizó cabildos para conocer el sentir de la ciudadanía y reflexionar en torno al envejecer,  en su constante lucha por avanzar a una sociedad antiedadista.

Para conocer la experiencia y las reflexiones en torno a este trabajo conversamos con Agnieska Bozanic, Psicóloga, Presidenta de Fundación GeroActivismo.

N: ¿Cómo surge la idea de levantar estos Cabildos?

A: Con Patricia Pinto (secretaria de la Fundación GeroActivismo) desde el comienzo del estallido social, notamos que comenzaron a emerger encuentros que convocaban a diferentes voces que provenían desde la marginalidad, como el feminismo, mujeres, población LGTBIQ+, niñez y pueblos originarios.

Dichos encuentros proponían discutir sobre diversas temáticas atingentes, pero nunca vimos que convocarán a hablar sobre la vejez. A esto se le sumó, la virilización algunas noticias con estereotipos negativos hacia mujeres mayores que participaban de las manifestaciones. Así empezamos a hablar acerca del estallido, la presencia de personas mayores en ella, del rol que estaban tomando y la importancia de visibilizar su participación desde una perspectiva positiva y sin edadismo.

Entonces nos preguntamos cómo podíamos aportar a la discusión. Antes de saber siquiera que una Nueva Constitución era viable, comenzamos con nuestros Encuentros Intergeneracionales para repensar la vejez a propósito del estallido social.

Lo consideramos como una oportunidad para combatir imaginarios sociales edadistas, que se estaban reforzando a propósito de la participación de las personas mayores en las manifestaciones en el estallido social. Donde se veían titulares como, por ejemplo, “los abuelitos tiernos, cariñosos, pobrecitos… participan, salen con pancartas”, en vez de describirlos como ciudadanos, combatientes, potentes, rebeldes, valientes, fuertes, etc.

N: ¿Cómo describirían que ha sido la respuesta de los participantes?

A: A los encuentros cabildos intergeneracional han participado personas de distintas edades, con convicciones diversas, lo que ha permitido pensar y reflexionar sobre los conflictos y necesidades de las personas mayores. Por lo cual creemos que ha sido un éxito. Alcanzamos a realizar 5 versiones entre Santiago, Viña del Mar y Rancagua. La disposición de las y los asistentes fue de apertura al dialogo dentro de un espacio de escucha y respeto. Percibimos, además, que las y los asistentes tomaron este espacio como una gran oportunidad de inclusión, en donde todas las voces eran escuchadas sin diferenciación de edad.

N: ¿Cuáles son los temas relevantes para las personas mayores que han salido en este contexto? 

A: Nuestros encuentros fueron intergeneracionales, con el fin de hacer un llamado, no sólo para incluir a las personas mayores, sino a diversas generaciones que estuvieran interesadas en aportar en la nueva visión acerca de la vejez. En este contexto, las principales conclusiones rescatadas son:

  • Relación con y entre las personas mayores: respeto, tolerancia, comunicación, empatía, ser vistos, valorados, escuchados. Entre y dentro de la misma generación, solidaridad intergeneracional.
  • Pasar de la noción de dependencia a interdependencia: Este principio afirma que las vidas humanas siempre se viven en interdependencia, o sea, en redes de relaciones compartidas, y que es precisamente en estas redes donde se expresan las influencias histórico-sociales. De manera operativa, se trata de ver la interdependencia de las diversas trayectorias de un mismo individuo respecto de otros individuos y grupos; y, entre otras, una de las líneas de investigación que se ha destacado en este sentido es la articulación familia-trabajo. Es porque las vidas se viven en interdependencia que las transiciones individuales frecuente- mente implican transiciones en las vidas de otras personas –como lo evidencia la dinámica familiar, una de las dimensiones más estudiadas que incluye la vertiente de análisis de la transmisión y las relaciones intergeneracionales.
  • Cambiar la concepción edadista del envejecimiento y la vejez: pasar de una visión asistencialista y de caridad a la de sujeto de derecho y empoderado, no infantilizar ni ser condescendiente.
  • Modificar la noción capitalista del envejecimiento y la vejez: pasar de la búsqueda y promoción de la productividad al sujeto de derecho.
  • Generar cambios estructurales a nivel macrosocial: contar con instituciones que puedan otorgar acceso oportuno y soluciones eficaces ante las necesidades de las personas mayores, mayor trabajo interministerial, mejoras a nivel de salud, pensiones, educación y trabajo para personas mayores que lo requieran.

N: ¿Qué elementos consideras imprescindibles para construir una nueva Constitución antiedadista?

A: Como GeroActivistas realizamos acciones y difundimos ideas que promuevan una visión positiva del envejecimiento y vejez para lograr una sociedad inclusiva con la diversidad, que favorezca la participación de todas las edades, en específico de las personas mayores. Nuestro anhelo es vivir en una sociedad antiedadista, es decir, que sea amigable para todas las generaciones y que no discrimine a quienes tienen más o menos años.

La Constitución actual es ambigua y no incluye específicamente a las personas mayores. Sin embargo, Chile ratificó en el año 2015 la Convención interamericana sobre la protección de los derechos humanos de las personas mayores, el cual sería funciona como marco legal en cuanto a protección de la vejez.

Aún así observamos una violación sistemática de los derechos humanos de las personas mayores por parte del Estado de Chile. Es por esto que se hace urgente repensar la vejez dentro de una marco legal que nos permita la protección completa de esta última etapa del ciclo vital.

La creación de una Constitución que vele realmente por los derechos humanos de las personas mayores permitirá visualizar a las y los mayores como sujetos de derecho, protagonistas de su propia vida y del cambio social, en vez de objetos de caridad. Esto ayudará, sin dudas, a resignificar la imagen de la vejez en Chile, que debe evidenciar heterogeneidad, pues las “vejeces” darán cuenta de distintas formas de vivir y apropiarse del proceso de envejecimiento y que comprenden distintas generaciones y que han vivido circunstancias históricas y socioculturales diversas, con trayectorias vitales únicas, con demandas y recursos diferentes.

Insistir en nueva imagen de la vejez conlleva indirectamente a una nueva forma de interacción intergeneracional, la cual permitirá la construcción de una sociedad basada en relaciones igualitarias y equitativas entre sus ciudadanos.

Por lo tanto, una constitución antiedadista incluye las problemáticas, necesidades y promoción/protección de derechos de la vejez, y requiere de la participación de actores que tengan consciente que las personas mayores son y deben ser protagonistas sociales, activos y activistas, y que esta parte de la población ha tendido a ser excluida y discriminada. Todas y todos debemos tener la convicción de que la sociedad puede y debe incluir a todas las edades.

N: ¿Consideras que las autoridades actuales sostienen discursos edadistas?

A: Sin dudas. Los discursos del presidente, y las y los parlamentarios rayan el paternalismo y condescendencia, lo cual es un acto de discriminación. Se dice que el lenguaje crea realidad. Solemos ver con regularidad que se usa el “nuestros” mayores, a pesar de que muchas autoridades son parte del grupo de la tercera edad, algunos hasta de la cuarta edad. ¿Porqué no hablar de “nosotros”? Por la imagen social negativa que tiene la vejez en nuestro país. “Los otros” son los mayores.

N:¿Qué propones para combatir el edadismo?

A: Para comenzar, es urgente reflexionar acerca de los propios estereotipos acerca del envejecimiento y vejez y cómo éstos influyen en las decisiones que tomamos cada día. ¿Estamos haciendo caso a la “profecía autocumplida”, es decir, estamos actuando como la sociedad espera que actuemos según nuestra edad?

Esto se refleja directamente en las conductas edadistas que podemos estar teniendo con nosotras/os mismas/os. Si nos discriminamos por edad, ¿cómo podemos dejar de discriminar a otros por el mismo motivo?. En segundo lugar, cuidar nuestro lenguaje. No seguir perpetuando cotidianamente imaginarios sesgados y negativos de las personas mayores.

N: Un mensaje para nuestros lectores incentivando el GeroActivismo y compartiendo tus redes, pagina web y redes sociales.

A: Queda todas y todos muy bienvenidos a unirse a nuestra lucha porque juntas y juntos somos más!. Somos una Fundación que promueve una visión positiva del envejecimiento y vejez, combatiendo el edadismo. Prontamente haremos un llamado internacional a embajadoras y embajadores para que colaboren desde sus trincheras y así unir fuerzas. Para que en el futuro podamos decir que vivimos en una sociedad con menos #edadismo y más #GeroActivismo.

Nuestra página web es www.geroactivismo.com, y estamos en Instagram, Facebook, Twitter y Youtube.

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Por Nicolás Cisternas Sandoval. Psicólogo. Corresponsal Chile, Argentina y Uruguay., Especialista y Magister (C) en Psicogerontologia